Hoy, 23 de febrero (o 9 No'j, para referirnos en los mismos términos), da inicio a una nueva cuenta calendárica, la número 5124.
Durante esta semana, desde el lunes 18 (4 B'e), inició el Wayeb', ese mes en el calendario solar que tiene sólo cinco días, los cuales concluyeron ayer viernes 22 de febrero (8 Ajmaq). Con ello, se cierra el Cholq'ij, el calendario solar que consiste en 365 días, que consiste en 18 Winaq (meses) que tienen 20 Q'ij (días) cada uno, más el mes corto.
Los cinco días anteriores, fueron los momentos propicios, como toda transición, para reflexionar en el tiempo que termina y en el nuevo que viene, evaluando los logros y sopesando lo que se dejó de hacer, para replantearse el futuro año con mejores decisiones y una mejor planificación.
El símbolo de este nuevo año es el B'elejeb' (9) No'j, que significa autoridad, sabiduría, creador y formador, fuerza mental e inteligencia. Es un año propicio para la buena administración con enfoque humano.
Así como otros calendarios prehispánicos, del área mesoamericana, el calendario maya se basa en la cuenta de ciclos. Las fechas, los números y los símbolos se conjugan para crear nuevos años. Ello no sucede en el calendario occidental por le que se rige la fecha oficial de Guatemala, en donde un día como hoy, 23 de febrero de 2007, sólo ocurre una vez en la vida. El tiempo sigue linealmente sin que haya repeticiones.
En el caso maya, las cuentas, los ciclos, el círculo, hace que los símbolos se reencuentren, y formen así las características del año venidero. De acuerdo con las especulaciones, se dice que el calendario maya concluye el 21 de diciembre del 2012, en el calendario cristiano, lo cual ha dado motivos a temores infundados de creer que los mayas habían profetizado el fin del mundo para esa época.
Sin embargo, sucederá que ese día, cuando se celebre el año viejo maya, se iniciará un nuevo ciclo.
El cálculo realizado para estos calendarios no es fácil. Al contrario, su complejidad merece un sistema de conocimientos que se adquirieron con el perfeccionamiento del calendario maya. La casa sacerdotal Ah Kin fue la encargada de este perfeccionamiento, ya que tenía los conocimientos matemáticos y astronómicos, que, combinados con su cosmovisión, lograron crear el calendario más exacto que se conoce hoy día.
Varias organizaciones indígenas celebraron el año viejo-año nuevo, entregando calendarios mayas a curiosos.
El símbolo de este nuevo año es el B'elejeb' (9) No'j, que significa autoridad, sabiduría, creador y formador, fuerza mental e inteligencia. Es un año propicio para la buena administración con enfoque humano.
Así como otros calendarios prehispánicos, del área mesoamericana, el calendario maya se basa en la cuenta de ciclos. Las fechas, los números y los símbolos se conjugan para crear nuevos años. Ello no sucede en el calendario occidental por le que se rige la fecha oficial de Guatemala, en donde un día como hoy, 23 de febrero de 2007, sólo ocurre una vez en la vida. El tiempo sigue linealmente sin que haya repeticiones.
En el caso maya, las cuentas, los ciclos, el círculo, hace que los símbolos se reencuentren, y formen así las características del año venidero. De acuerdo con las especulaciones, se dice que el calendario maya concluye el 21 de diciembre del 2012, en el calendario cristiano, lo cual ha dado motivos a temores infundados de creer que los mayas habían profetizado el fin del mundo para esa época.
Sin embargo, sucederá que ese día, cuando se celebre el año viejo maya, se iniciará un nuevo ciclo.
El cálculo realizado para estos calendarios no es fácil. Al contrario, su complejidad merece un sistema de conocimientos que se adquirieron con el perfeccionamiento del calendario maya. La casa sacerdotal Ah Kin fue la encargada de este perfeccionamiento, ya que tenía los conocimientos matemáticos y astronómicos, que, combinados con su cosmovisión, lograron crear el calendario más exacto que se conoce hoy día.
Varias organizaciones indígenas celebraron el año viejo-año nuevo, entregando calendarios mayas a curiosos.
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