En Guatemala hay dos elecciones infantiles: una para adultos y otra para niños.
En estos días, ya se puede ver anunciado el evento de las elecciones para niños (no digo “infantiles”, para evitar malentendidos). He visto a muchos niños que se ilusionan por su primera “experiencia” electoral. Los padres, orgullosos de que sus retoños empiecen a aprender a ser ciudadanos, los han llevado a empadronarse.
Claro está que el resultado de estas elecciones no importa; los candidatos a la presidencia deben de ver este proceso de niños con mucha simpatía. Las elecciones de niños pueden verse como un buen sondeo de la imagen de los candidatos, pese a que votarán por el mismo candidato de sus padres. En caso contrario, si los padres creen en el voto secreto, los niños votarán por la cancioncita de moda.
Creo que las elecciones de los niños tienen algunas deficiencias; por ejemplo, es indudable que no todos los niños de Guatemala están empadronados. Talvez, ni la mitad irá a votar, pues dependen del “jalón” que les dan sus padres; algunos de éstos no han de creer en la democracia, o se desesperarán del tráfico.
También, es de suponer que los niños que votarán sólo serán de las regiones urbanas, y de éstas, sólo las más céntricas; los niños de la capital, pero de los barrios marginales, no estarán interesados en acudir.
Este ejercicio de “ciudadanía” de los niños, también debería estar acompañado de un asesoramiento por parte de los padres de familia, para que los hijos no tomen las elecciones como un juego, ejerciendo el voto sin ninguna reflexión, votando por cualquiera.
EN ESTE PUNTO QUIERO HACER UN ALTO, y darme cuenta de que entre las elecciones de niños y las de adultos no hay mucha diferencia. En ambas, los votantes están siendo condicionados por personas que hacen públicas sus preferencias (ya sea los padres de los niños, o los periódicos que coaccionan por las encuestas, o los columnistas de opinión que dicen por quién votar, para los adultos), sin importarle un pepino que el voto es secreto (y esto, más que un derecho, es una obligación).
Tanto niños como adultos se dejan llevar por la cancioncita; el empadronamiento no abarca a todos los que son, ni mitad de éstos acudirá a votar, motivados por las dificultades de salir. La mayoría de los votos vendrán de las regiones urbanas, las no marginales, pese a que el TSE peleó por 200 millones de quetzales más para descentralizar, sin que lo hubiese logrado.
Tanto niños como adultos irán a las urnas sin ninguna reflexión, y sin idea de cuál es el plan de Gobierno de los candidatos, ni quiénes formarán el gabinete.
Y, lo más preocupante, es que los resultados realmente no importarán para el futuro del país, y los candidatos deben de ver este proceso con cierta simpatía, por no decir con risa.
1 comentario:
solo para que sepas, los niños estan muy concientes de lo que son las elecciones, asi como el fin que tiene dicha actividad la cual es fomentar el civismo en los niños, que sepan sus derechos y obligaciones como ciudadanos guatemaltecos que son.
Las votaciones se llevaran a cabo a nivel nacional en 84 municipios del pais, no creo que haya problema en cuanto a que no puedan botar pues los centros de votacion estan localizados en todo el pais estos son: pollo campero, quick photo, paiz, hiper paiz, despensas familiares, cemaco y bancos G&T continental, los niños que no se empadronaron podran hacerlo ese día en las mesas de votación. Para terminar te aconsejo que investigues a fondo las situaciones para no crear dudas en donde no las hay. Si necesitas mas información no tengas pena y me la pides.
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